¿Qué te gustaría ser?

¿Qué te Gustaría Ser?

Clara está en grado doce y no sabe qué va a hacer en el futuro. Muy pronto terminará su escuela y ya es hora que se decida qué quiere hacer. Ella quiere tener algún día una casa grande y un carro bonito. Para esto tiene que trabajar, tiene que estudiar, pero no sabe qué carrera quiere seguir. Clara habla con su consejero.

-Hola consejero. No sé qué quiero hacer con mi futuro. Todo me gusta y nada me gusta al mismo tiempo. Estoy muy confundida.

-¿Qué te gustaría ser?

-Quisiera ser una abogada.

-Te recomiendo que vayas a un bufete de abogados para que veas cómo trabajan. Lo mejor para tomar una decisión como esta es aprender de la experiencia.

Clara vuelve donde el consejero y le dice -Ya he ido a un bufete de abogados. Los abogados son muy ocupados. A mí no me gusta ser muy ocupada. Me gusta tener tiempo libre para hacer mis cosas.

-No quieres ser abogada, entonces, ¿qué te gustaría ser?

-Quisiera ser una arquitecta.

-Te recomiendo que vayas a una firma de arquitectos entonces.

Clara vuelve donde el consejero y le dice -Ya he ido a una firma de arquitectos. Los arquitectos son muy raros y pensativos. A mí no me gusta la gente rara y pensativa. Además, me cuesta inspirarme.

-No quieres ser abogada ni arquitecta, entonces, ¿qué te gustaría ser?

-Quisiera ser una científica.

-Te recomiendo que vayas a un laboratorio para que veas cómo trabajan los científicos. Ellos son personas muy dedicadas a sus causas.

Clara vuelve donde el consejero y le dice -Ya he ido a un laboratorio. Los científicos

viven encerrados en un laboratorio. A mí no me gusta estar encerrada. Prefiero el aire libre.

-No quieres ser abogada, ni arquitecta, ni científica, ¿qué te gustaría ser?

-Quisiera ser dentista.

-Te recomiendo que vayas a un consultorio odontológico para que veas cómo trabajan los dentistas. Los dentistas son personas muy pacientes.

Clara vuelve donde el consejero y le dice -Ya he ido a un consultorio odontológico.

Los dentistas tienen que poner sus manos dentro de las bocas de sus pacientes. A mí no me gusta poner mis manos en las bocas de la gente. ¡Me da asco!

-Pero es que no quieres ser nada. No te puedo ayudar.

Clara se va muy confundida. Ella no quiere ser bombera, ni carpintera, ni cartera, ni detective, ni diseñadora, ni doctora, ni enfermera.

Después de mucho pensarlo, Clara decide ser política. Los políticos no son muy ocupados, no son raros, no viven encerrados en laboratorios, ni meten sus manos en las bocas de la gente. Los políticos tienen casas grandes y carros bonitos.

Clara vuelve a donde el consejero y le dice —Ya sé, quiero ser política. Los políticos no son muy ocupados, no son raros, no viven encerrados en laboratorios ni meten sus manos en las bocas de la gente. Los políticos tienen casas grandes y carros bonitos. ¿Qué piensa?

-Me alegro que hayas encontrado algo que te guste, pero la verdad, odio los políticos. Tengo mis razones personales para decirte esto.

-Le prometo que seré la mejor política del mundo. Construiré nuevas escuelas y hospitales. Le ayudaré a los pobres y pondré menos impuestos. Le daré a la gente más días de vacaciones al año. Protegeré los bosques, los mares y los animales.

-Bueno, pienso que sirves de política. Eres buena haciendo promesas que no podrás cumplir.